Crecimientos ganglionares


Son causa de inquietud en los padres, cuando un niño refiere molestias de garganta con dolor y dificultad al paso de alimentos,  el notar al tacto que debajo de la mandíbula se logra sentir alguna bolita que al presionar en forma ligera, causa mucho dolor al niño. Estas bolitas que aumentan de tamaño relacionadas con un proceso infeccioso, más frecuentemente corresponden a ganglios linfáticos, que son las primeras barreras a las que se encuentran los microorganismos que pretenden invadir al cuerpo. Se ubican en ese lugar en forma similar a un sistema de drenaje que finalmente llega a una terminal en donde se realizará la eliminación del germen.
Estas bolitas, están repartidas por distintas partes del cuerpo y contienen células de gran importancia que combaten las infecciones. Corresponden a estructuras redondas de menos de 1 cm, rodaderas, no adheridas a planos profundos. Estas defensas están repartidas muy estratégicamente, en las ingles, en las axilas, cuello, tórax, abdomen, y extremidades inferiores, en un total aproximado de quinientos ganglios que están conectados al sistema linfático, que es el que se encarga de limpiar al cuerpo de todo germen que pueda amenazar con introducirse a la circulación sanguínea.
Cuando se produce una infección, las células defensivas atacan a los gérmenes que se encuentran deambulando por el sistema linfático hasta llegar a los ganglios, es por eso que se inflaman y aumentan de tamaño provocando al niño dolor, esto se conoce como adenopatía. Nosotros podemos sentir esa hinchazón solamente palpándolos.
 En ocasiones los ganglios pueden estar inflamados como secuela de una anterior infección sin que esto suponga ningún problema, también hay niños que son más propensos a tenerlos ligeramente más grandes que otros, como una variante de tamaño, incluso hay niños que pueden tener los ganglios inflamados a menudo, sobre todo si van a la guardería, pues están más expuestos a los gérmenes, pero esto les ayuda a reforzar su inmunidad.
El aumento del ganglio inflamado se denomina adenopatía por lo que hablaremos de adenopatías cervicales si aparecen en el cuello, axilares en la axila e inguinales en la ingle. Su presencia en estos lugares está influido por la existencia de una infección en los tejidos cercanos como ejemplo del oído puede causar adenopatía cervical, de los pulmones para afectar a los de la región axilar o de vías urinarias para causar modificación inguinal.
En ocasiones, el peligro es cuando las células defensoras no son capaces de acabar con estos gérmenes y el ganglio se infecta, entonces la inflamación es mucho mayor y puede aparecer fiebre y dolor. En algunas ocasiones la infección puede ser tal, que el ganglio llega a generar un licuado de células que en conjunto forman la pus (adenoflemón o pioadenitis), y ante su presencia, el organismo empieza a modificar la superficie de la piel para poder abrirse paso al exterior, y es ahí cuando genera enrojecimiento intenso de la piel, con inflamación progresiva de tejidos, para permitir que se comunique finalmente al exterior a su liberación y con ello eliminación de la sustancia dañina.
Es conveniente, consultar al médico obligatoriamente si al niño le duelen cuando los tocamos, cuando tiene fiebre, si los ganglios están duros y no se mueven o vemos unas manchas rojas en la piel, sobre el ganglio, de esta forma evitaremos posibles males mayores, como la condición que la pus se libere en el interior del organismo y pueda facilitar la extensión de la infección, o pasar a la circulación sanguínea para permitir que el microorganismo haga siembras de infección en otras partes del cuerpo, y causar infecciones mas graves.
Los ganglios que se encuentran en la región abdominal en niños de edad menor, pueden crecer e inflamarse y ser causa de dolor abdominal intenso que se confunde en ocasiones con infección del apéndice por lo que, ante un niño con dolor abdominal intenso, se justifica siempre la valoración adecuada por el médico para descartar estas dos alteraciones que tienen tratamiento diferente.
Los ganglios que se localizan en el interior del pecho (tórax), pueden llegar a obstruir la circulación de algunas venas en el interior, que al tener relación con la colección de sangre en una mitad del pecho o del brazo, hacen que se note en esas partes aumento de volumen y congestión de las venas. En estos casos los ganglios pueden tener una enfermedad de tipo canceroso que también requiere de la valoración inmediata de su médico de confianza por la enfermedad llamada linfoma.
Este linfoma también puede manifestarse con aumento de tamaño en la mayoría de los ganglios del cuello, y el diagnóstico se sospechará al no haber antecedente de infección previa en alguna parte de la cabeza o cara, además de la multitud de ganglios crecidos, y es prioritaria entonces la atención para atacar la enfermedad, antes que avance a otros lugares y pueda remitir con el tratamiento de forma conveniente.
En algunos casos, el arañazo de un gato puede dar lugar a una infección de la piel, debido a un germen que vive debajo de las uñas del felino. Sus síntomas: se produce un enrojecimiento de la herida, acompañado por el engrosamiento de los ganglios linfáticos localizados alrededor de la zona afectada. En su tratamiento generalmente se recupera de forma espontánea en mes o mes y medio, siempre que no existan más lesiones producidas por el gato.
Otra enfermedad particular (llamada mononucleosis infecciosa),  producida por un virus especial, afecta a los ganglios condicionando crecimiento en varios lugares y se asocia con aparición de manchas en la piel como puntos rojos, y además dolor abdominal por crecimiento del bazo, y fiebre de intensidad significativa y prolongada, que es meritoria de estudios especiales para su confirmación por parte de su médico.
Como norma, las adenopatías pequeñas no precisan tratamiento, solo deberemos tratar la infección coincidente. El tratamiento antibiótico y el abordaje quirúrgico sólo estarán indicados cuando exista un gran adenoflemón que sea preciso el evacuar. 
Ante la existencia de adenopatías muy grandes, numerosas y localizadas en múltiples lugares, es conveniente la atención temprana para evitar la propagación de una enfermedad maligna o bien realizar estudios para descartar esta patología.